25 abr 2010

Un poco de Bécquer...


Asomaba a sus ojos una lágrima,

y a mi labio una frase de perdón;

habló el orgullo y se enjugó su llanto,

y la frase en mis labios expiró.

Yo voy por un camino, ella por otro;

pero al pensar en nuestro mutuo amor,

yo digo aún: ¿por qué callé aquél día?

y ella dirá: ¿Por qué no lloré yo?

Es cuestión de palabras, y, no obstante,

ni tú ni yo jamás,

después de lo pasado convendremos

en quién la culpa está.

¡Lástima que el amor un diccionario

no tenga donde hallar

cuándo el orgullo es simplemente orgullo

y cúando es dignidad!








2 comentarios:

WHO dijo...

Juguetona te veo......
Gracias por tu visita y comentario.
Un beso niña, Who.

La niña del vaso de agua dijo...

si....algo poetica diria yo.
Gracias a ti por visitarme y por el comentario.
me gusta mucho todo lo que escribes.
Un beso, Who.

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